Un monitor de tenis vive siempre a expensas de un montón de cosas externas y poco asociadas a su propio trabajo. Por empezar por el principio somos una rama laboral que no existe, pero estamos vivos.
En España nuestra categoría laboral se llama Monitores de Espai, con lo que supone al propio Monitor. Existimos se lo aseguro y somos muchos los que nos dedicamos en cuerpo y alma a enseñar a nuestros/as peques a jugar a este maravilloso deporte del tenis.
Hace muchos años que ha dejado de interesarme que valoren mi trabajo, he aprendido a ser yo mismo quien me lo valore. Este verano estado con lecturas básicamente de tenis, de grandes profesionales según mi persona y otros por diferencias de criterio no tan grandes, aunque son los que ley con más interés para aprender de otros puntos de vista sobre nuestro deporte.
Monitores son todos aquellos que lanzan una pelota de tenis apoyados por unas experiencias que le permiten no engañar a sus alumnos y comprenden las necesidades de cada uno.
Es por ello que estamos ubicados en diferentes sectores:
Monitores de Tenis de base, particulares, perfeccionamiento, competición.
Debe ser un monitor completo, que se adapte a las necesidades del propio club, su criterio como trabajar solo será aceptado en función de esas necesidades que están marcadas anteriormente, cobrara poco por hacer mucho.
Monitores por Sectores dentro del mismo club.
Base; A mi juicio los monitores de Base son los que deben estar más formados.
Por la propia edad de sus alumnos deben comprender que lo que con ellos aprendan será con lo que caminen en un futuro. Estos niños asimilan toda la información que se les da, son verdaderas esponjas. Y lo que es más importante en estas clases, debemos conseguir que amen este deporte y vean a través de la actividad que realizan que es divertido.
Gustarte los niños y agradecer a los padres que escojan el tenis como deporte para que practiquen sus hijos se tiene que agradecer y aceptar la responsabilidad que ello conlleva para los Monitores por encima de todo lo demás.
Estos monitores de Base son quien marca el verdadero camino de los niños/as que se inician en el tenis.
Ellos empujan al gusanito de todo niño para que se divierta y pueda crear su sueño de ser tenista.
Problemas con los que se enfrentan estos Monitores.
- Primero- que la mayoría no están formados para esta actividad.
- Segundo-A los clubes no les interesa esa formación de sus Monitores, acarrea un sueldo que no están dispuestos a pagar.
- Tercero- Se utiliza para la actividad a jugadores del propio club para abaratar dicha actividad.
- Cuarto- No se da la importancia que esta actividad merece, se trata de organizar una pequeña guardería para la escuela de tenis.
- Quinto- al no tener Monitores especializados la actividad no consigue se rompa el goteo de niños que se borran por no divertirse.
- Sexto- Estos Monitores son lo más importante de una escuela, son los primeros que forman la escalera hasta llegar estos niños a pasar etapas dentro de la propia escuela.
- ESTO NO SE ESTA CONSIGUIENDO.
Podría seguir por zonas como el perfeccionamiento o competición, pero al final si nos damos cuenta en estas diferentes etapas ahora en la actualidad ya hablamos de competición, bien sea Juvenil o profesional.
Podríamos hablar de clubes o Academias o grupos de competición particulares.
¿Qué Monitores son precisos?
Al final creo que todo lo resumimos a lo mismo dinero, dinero y dinero.
Estamos en un deporte caro, tal vez sí, pero también en un deporte que abusa según estén pisando nuestros alumnos. Todo es competición, todo se cobra igual.
Un peque con 8 años empieza la competición juvenil, el miedo de los propios padres por su ranking ya hace que estemos formando tenistas, no niños que juegan al tenis.
Es un gran error.
La carrera de los jugadores cada vez es más longeva, si ponemos a un niño a competir a esas edades con la presión que genera la propia competición, debemos saber muy bien el idioma que hablamos tanto a padres como al mismo peque.
Palabras como ganar, campeón, se tienen que cambiar por trabajo, divertirse y humildad.
Si conseguimos todos creernos estas palabras conseguiremos dejar que los niños maduren como deben madurar en todas sus facetas.
Física, psicológica, tenística, escolar, hay muchas fases que pretendemos acelerar y lo que hacen es un paso hacia adelante y dos para atrás.
Al final el resultado es que son niños que abandonaran de jugar a edades donde aún podrían disfrutar mucho.
UN MONITOR es aquel que se mira de formar por el simple hecho de que ama su profesión.
Muchos por haber jugado al tenis ya se les atribuyen unas cualidades que en la enseñanza o son las que se precisan y las que se precisan no se tienen.
Vivimos en país que busca los objetivos a un corto, muy corto plazo y por un resultado somos los mejores y por otro los peores.
Los valores que tanto se habla últimamente son aquellos que debe llevar uno mismo en su vida, aprendidos por aquellos que le quieren y le miraron de enseñar un camino de respeto a todos y todo.
Un Monitor de tenis es persona, el área que cada uno pisa debe ser el que considera está capacitado para pisar, pensando en el respeto que hay que tiene por quien tenemos delante y lanzamos una pelota de tenis.
Cuando entramos en competición juvenil es muy importante ayudar a los padres a comprender donde entran, si al final no pueden facilitar a sus peques lo que necesitan para continuar sus pequeñas carreras por el fango de la dureza de luchar por su sueño es romperles mucho trabajo hecho anteriormente.
En la actualidad nadie ayuda ni ayudara a estos niños, solo se ayudan aquellos que ya tienen en sus maletas resultados que atesoran una buena carrera deportiva. Lo cual creo que es un error, se debe ayudar por y la formación.
En esas búsquedas de esos resultados desaparecen por el camino, grandes peques con un gran tenis.
Monitores, no penséis que ganáis un partido o lo perdéis, lo que hacemos con lo que enseñamos es dirigir a un peque en su formación hacia ser un gran deportista.
Si con eso no os conformáis es mejor no ejercer esta profesión, los grandes entrenadores son aquellos que tiran las pelotas a los niños y les arrancan sonrisas, les enseñan a compartir con otros alegrías, lágrimas y forman equipo. Nuestro trabajo debe servir para que si algún día esos peques llegan a la cima de lo que llaman tenis, que llegan muy pocos, otros sepan ser capitanes de ese barco y aplaudidos por las masas.
Amar el tenis y dejar que el tenis os ame a vosotros, si no se pasa por la base que es donde se forma verdaderamente un Monitor, no se es Entrenador de nada.
Y qué más da que ser olviden de vuestro nombre, siempre estaréis en el corazón de ese niño que jugaba con vosotros al tenis y ahora es llamado tenista.
Hablemos si se desea de psicología, técnica, táctica, de lo que se quiera, de lo que significa ganar o perder, de lo que significa este deporte, pero si olvidamos que somos responsables de una gran parte de la educación de estos niños que llegan a nosotros, lo perdemos todo.
Nada vale.
Termino con un pequeño aplauso a todos estos peques que luchan por disfrutar con una raqueta y pelota enfrentándose a la dureza del mismo deporte.
A los padres decirles que si lo que se desea es llegar primero a la meta no llegareis a ninguna a ninguna meta. Os quedareis en la mitad del recorrido y con vosotros se quedaran vuestros peques.
No me hagáis mucho caso, solo hablo de aquello que después de 30 años con mi amiga la raqueta en la mano, siento después de muchas lecturas y charlas sobre este maravilloso deporte me llevan a solo, contar cosas.
Darle a esos MONITORES DE BASE el mérito que tienen porque SIN ELLOS nada sería POSIBLE.
